¿Quiénes somos?
Somos una familia de misioneros voluntarios al servicio de Dios.
Familia Domínguez Núñez
Nos presentamos:
Somos una familia de misioneros voluntarios al servicio de Dios. Nuestros nombres son Víctor, Ana Isabel, Jócabed y Sergio Abel.
Nuestra primera Experiencia:
Antes de que tuviéramos a nuestros hijos, en el año 2014 tuvimos nuestra primera experiencia en Bolivia, concretamente en el Departamento del Beni. Estuvimos en Rurrenabaque, en un Orfanato Escuela llamado «Familia Feliz». Fue una experiencia que cambió nuestra vida por completo. Estuvimos como maestros y papás de un grupo de 7 niños con edades comprendidas entre los 4 y 7 años. Allí pasamos un año bendecido por Dios junto a estos niños y con otros niños y niñas de este Orfanato Escuela. En este lugar vimos también las necesidades que había en estos lugares y que podíamos, bajo la mano de Dios, ayudar con nuestros pequeños talentos que Él nos había dado, para compartirlos con niños, adolescentes, jóvenes y adultos en aspectos tanto físicos, mentales y espirituales. En el 2015 volvimos a España.
Segundo llamado de Dios:
Entre los años 2015 y 2018, el Señor nos regaló dos hijos maravillosos. Pasados unos años en España el Señor Dios volvió a llamarnos al campo misionero y después de mucha oración, recibimos la clara respuesta de Dios de volver a marchar. Desde el 2019, nuevos retos, nuevas experiencias y más dependencia de Dios han sido y siguen siendo motores que nos impulsan diariamente al servicio de Dios.
Nuevamente rumbo a Bolivia.
Dios nos volvió a traer a Bolivia. Comenzamos en un proyecto nuevo para nosotros llamado Fundación Orión. En esta Escuela Misionera, llamada también Instituto Quebrada León, estuvimos durante 20 meses formándonos en diferentes áreas como: salud, evangelismo, liderazgo y otras áreas prácticas para poder ser más útiles en el campo misionero. Pasado este tiempo, la Fundación Orión nos hizo un llamado para quedarnos y poder colaborar con ellos. Estamos agradecidos a Dios por las grandes bendiciones que hemos recibido en este lugar. Dios es maravilloso y nos sigue cuidando, protegiendo y dándonos la oportunidad de servirle cada día en este país de Bolivia.
